¿Pueden los árboles librarnos de la contaminación?

El equipo de Iberflora somos perfectamente conscientes del valor cultural, ornamental y medioambiental que los bosques urbanos tienen en nuestros municipios.
A tenor de este importante tema, el diario El Mundo publicaba la pasada semana un interesante artículo titulado “Las ciudades se vuelven verdes” en el que abordaban la importancia de la presencia de arbolado en los espacios urbanos.
A la pregunta “¿Pueden los árboles librarnos de la contaminación?”, la respuesta, según las circunstancias que envuelven a los entornos urbanos, es que probablemente no, al menos, todavía.
La mala calidad del aire en las ciudades es un importante riesgo para la salud, y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 80% de las ciudades en el mundo superan los límites de calidad del aire establecidos por esta organización, un aire contaminado causante de muchas de las enfermedades respiratorias y cardiovasculares que sufre la población que habita estos espacios.
Sin embargo, cada vez son más las empresas, organizaciones, comunidades científicas y particulares las que están luchando por implementar una “solución verde” que mitigue los efectos del cambio climático y reduzca los niveles de contaminación en los espacios urbanos.
Algunas de las entidades decididas a abanderar este cambio son ACCIONA Service, encargada del mantenimiento y cuidado de parques y jardines en ciudades y municipios de toda España.
En palabras de Francisco Felices Barcia a El Mundo, el gerente Ute de Parques Históricos de ACCIONA, “los cuidados continuos evitan el riesgo de degradación y la pérdida de todo su valor ecológico ornamental y garantizan la seguridad de sus habitantes evitando la posible caída de árboles o ramas”.
Y es que los expertos coinciden en que el remedio a la contaminación del aire en los espacios urbanos puede solucionarse con la implantación de más zonas verdes que actúen como pulmones. ¿Cómo lograrlo? realizando un llamamiento a las entidades públicas para que implementen políticas e inversiones que promuevan el desarrollo de bosques urbanos, viviendas energéticamente eficientes, una mayor utilización de energías renovables y una mejora en la gestión de residuos.
Howard Gray, director técnico de cuentas de GreenBlue Cities, en palabras para El Mundo afirma que “aunque los árboles no son la solución definitiva al cambio climático, juegan un papel esencial en la mitigación de sus efectos en el clima”. Para el experto, “Los beneficios de los árboles urbanos son múltiples y actúan de diferentes formas en aquellas ciudades y países donde forman parte del paisaje”.
No hay, sin embargo, que implementar nuevas zonas verdes en las grandes ciudades sin criterio. Es de suma importancia hacerlo correctamente, mediante el estudio de cada especie, de la zona en la que van a ser plantados y efectuar posteriormente su correcta plantación para que estos crezcan de forma saludable, lo que repercutirá positivamente en su entorno.