Desde hace unos años, se está experimentando un cambio en la forma de vida de las personas, que les lleva a preferir las ciudades o grandes aglomeraciones a los ambientes rurales, y esto se observa en que las aldeas cada vez desaparecen más convirtiéndose en pueblos, y éstos en ciudades. Este aumento de la población y del urbanismo perjudica seriamente el medioambiente. Según el informe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP) presentado en la Cumbre de Johannesburgo, las proyecciones de la población para el 2025 ascenderán a unos 9.300 millones de personas, creciendo a razón de 75 millones de personas por año -en torno al 1,5% de promedio-, en su mayor parte correspondiente a los países en vías de desarrollo, que para el año 2050 triplicarán su población hasta alcanzar los 1.860 millones de personas.
Según Carlos Priego González de Canales, ‘la importancia de las zonas verdes en las ciudades radica en los efectos positivos que tienen sobre la población residente, efectos que pueden manifestarse en varios ámbitos de carácter social: En la conciencia ambiental o ecológica; en el proceso de enraizamiento (embeddedness) de la comunidad y de construcción de identidades socioculturales, en el sentimiento de seguridad, o en la salud mental y física de los ciudadanos entre otros.’
Carlos Priego habla de este tema y muchos otros puntos sobre las Áreas Verdes en las ciudades en este interesantísimo artículo que podéis leerlo completo en este enlace.
Fuente: Revista Ambient@
