Jaume Alagarda, presidente de la Federación Española de Empresas de Jardinería, aborda en esta entrevista cuál es el estado de salud del sector, las tendencias en gestión de espacios verdes y el concurso de ideas para sus asociados del que saldrá la “cocina del futuro” que se mostrará en Iberflora.
Cada día se habla más de la necesidad de zonas verdes para hacer frente a las consecuencias del cambio climático en las ciudades. En este contexto, la lógica nos dice que los servicios de jardinería deberían ganar protagonismo y relevancia frente a la administración. ¿Lo están notando en las contrataciones?
En muchas ciudades el servicio de jardinería representa un gran coste anual, tanto en mantenimiento como en mejoras. Cada día las empresas están más preparadas para realizar sus trabajos también los equipos de personal propio que tienen los ayuntamientos.
Pero realmente lo importante es tener equipos con capacidad y con preparación suficiente para que su trabajo sea cada día más eficaz, más rentable de cara a las nuevas líneas de trabajo y de gestión de los espacios verdes.
En las contracciones públicas, y muchas privadas, desgraciadamente no se aplica totalmente el criterio de eficacia y de capacidad técnica y sigue primando más el precio y las valoraciones económicas que la calidad del servicio. En las subastas se puntúa al más barato como el mejor y se contrata a empresas que no son las más adecuadas. Con estos procedimientos el cliente siempre sale perdiendo.
¿Cuál es el estado de salud de las empresas españolas de jardinería?
Las empresas están consiguiendo una buena salud técnica y económica porque desde hace unos años hay una fuerte concienciación de que los espacios verdes son muy importantes para la población. En nuestro jardín, en nuestro parque, sin embargo, sigue habiendo un gran déficit de formación, de consolidación, puesto que muchas se abren con medios precarios y después no acaban de consolidarse, dando lugar al intrusismo y a empresas de un bajo valor añadido. Pero en términos generales consideramos que las empresas de nuestro sector han crecido mucho y van en el buen camino porque están preocupadas por ser más eficaces y también más rentables. Es su única opción de futuro.
¿Cuáles son las tendencias en el manejo de plagas o de cuidados sostenibles de las zonas verdes?
Está claro que todos los profesionales de nuestro sector están preocupados por este tema que se está complicando mucho. La normativa aplicada y los procedimientos, la burocracia y la formación están dificultando el acceso a estas actividades, dando lugar a que o se especializan o bien contratan a expertos.
Las tendencias marcadas por la normativa europea nos llevan, sí o sí, a una jardinería más limpia, menos contaminante, mucho más sostenible, y sobre todo muy natural. Eso implica también que tenemos que desarrollar nuevas técnicas y aprovechar las que ya están en uso que tienen una menor repercusión medioambiental, como son el control biológico, los sistemas no contaminantes y comunes, la gestión de espacios gracias a la biodiversidad y las técnicas culturales que facilitan el desarrollo de parques “vivos”, sin tanta actuación, sin tanto un control químico. Esto no va a ser más barato, y con esto me remito a la correcta valoración en las contrataciones
El próximo año de nuevo una ciudad española, en este caso València, será la Capital Verde Europea. ¿Cómo valora el impacto de estas iniciativas en el sector?
Es un gran evento y para creemos que es una gran oportunidad para València. Esperamos que la Administración sea capaz de canalizar y rentabilizar este momento y que nosotros como empresas seamos también capaces de aprovechar el tirón, aprovechar un tren que pasa. Yo, siendo de València y además siendo también un observador especializado no he visto una gran repercusión y a nivel de espacios verdes y de aprovechar ese momento. Ha habido mucha inversión en movilidad, pero en espacios verdes creo que está siendo un poco insuficiente. Se trata de que la ciudad, la ciudadanía perciba el cambio y apueste por él.
La FEEJ este año colaborará con Iberflora en el espacio Home Inspiration / Greenfluencers con un concurso para diseñarlo. ¿Cree que también va a cambiar en el futuro el cómo se utilizan las plantas en los hogares?
Con este evento queremos cambiar esa visión de que la cocina tiene que ser moderna, vacía, sin elementos vivos. Nos gusta dar la sensación de que una cocina integrada dentro de un jardín, por así decirlo, es una cocina abierta, es cómo cocinar en tu patio, en tu jardín y en condiciones saludables. El hecho de que en el futuro la gente tenga más necesidad de estar en contacto con la naturaleza hace que consideren tener una cocina con plantas, bien en un espacio abierto o integrada. Será algo muy gratificante, pero además saludable, que podamos tener cerca las hierbas aromáticas y algunas verduras. De hecho, ya hay experiencias en algunos restaurantes de moda, en los que se ofrece “comer en un huerto o en la selva”.
Realmente es un evento innovador, nos gustaría generar la oportunidad para que muchos paisajistas, emergentes o consagrados puedan expresarse y valorar que este tipo de jardín es algo de interés y una oportunidad para los profesionales. Gracias a Feria València puesto que la iniciativa nació de ellos y es una gran idea.