Hoy os vamos a hablar del estudio que realizo ASEJA sobre la contribución económica, social y ambiental de los parques y jardines a las ciudades españolas
Empezaremos a hablar sobre la presentación del estudio y en nuevos post, hablar detenidamente de otros puntos, para que nos podamos hacer la idea de la situación actual de nuestro sector.
Jardín urbano en las ciudades
Según informes de Naciones Unidas, más del 50% de la población mundial vive en zonas urbanas, ascendiendo dicha cifra al70% en el territorio español, porcentaje que se incrementará en los próximos años.
Esta tendencia de zonas urbanas, afectará al paisaje urbano en el que habitamos.
Nadie duda de las ventajas que aportan las zonas verdes a la calidad de vida de la ciudad, y además cada vez es más habitual que el ciudadano, quiera tener una ciudad más habitable y sostenible con el medioambiente. Todo espacio verde tiene su potencial dependiendo siempre de factores como son su uso, la accesibilidad, la riqueza biológica, el diseño y la zonificación.
En este estudio se pone de manifiesto el valor de las zonas verdes para la ciudad, para que los responsables de la gestión del patrimonio verde lo tengan en cuenta a la hora de conservarlo.
Nuestras ciudades en los últimos 20 años
Durante estos últimos años, se ha buscado presencia de espacios verdes urbanos en la ciudad y poblaciones, y de esta forma aumentar la calidad de vida de los ciudadanos. Además de los aspectos estéticos, la naturaleza urbana se percibe como un elemento integrador entre valoraciones económicas, ambientales y sociales, y también, un elemento de identidad y de referencia. En este periodo, algunos organismos nacionales o internacionales se han aventurado a valorar y cuantificar las zonas verdes necesarias en las ciudades para que sus habitantes puedan alcanzar un pleno desarrollo, pero sin tener en cuenta ni la homogeneización de dichas cifras ni la calidad de su conservación o el uso de estos espacios verdes.
Hemos alcanzado unos niveles de zonas verdes de 10 m2/habitante, cumpliendo con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, y a día de hoy en España muchas de nuestras ciudades cumplen y superan dichos ratios de m2/habitante al igual que las ciudades europeas de nuestro entorno.
Sin embargo y lamentablemente en los últimos años, la crisis está motivando un progresivo deterioro de las zonas verdes, reduciéndose los niveles de calidad, por debajo de los mínimos necesarios para despertar en el ciudadano lazos emocionales que le hagan sentirse satisfecho con su entorno.
La gestión de la conservación de los jardines urbanos
En la conservación de los parques y jardines, en época de bonanza el objetivo era generar una gran cantidad de superficie de zonas verdes, dado que existía dinero para la gestión del mantenimiento, pero la abrupta irrupción de esta crisis económica ha impedido tener el tiempo necesario para abordar un modelo de gestión más racional para poder afrontar esta situación. Deberíamos de plantearnos como en nuestros países vecinos una gestión racionalizada de las zonas verdes, mediante un mantenimiento diferenciado por tipologías, sostenible no solo medioambiental sino también económicamente.
El escenario actual de los jardines urbanos
Como hemos indicado la crisis se ha instalado en el entorno de los servicios municipales y en la conservación de las zonas verdes, generando un escenario:
- Sin análisis de costes de conservación por tipologías con el que ajustar el presupuesto.
- Sin la concienciación de lo que cuestan este tipo de servicios.
- Sin comunicación con el ciudadano de la conveniencia de realizar recortes racionales en la conservación.
- Con unos contratos de conservación con importes anuales significativos con recortes a la baja.
- Con una creación de paisajes verdes no integrados en una identidad local, además de ser poco sostenibles económicamente.
- Con bajada de los niveles de calidad.
•Con partidas presupuestarias que en el mejor de los casos escasamente superan el 1,5 % del total del presupuesto municipal, cifras que contrastan con las que se dedican a limpieza viaria y recogida de basuras (en torno al 10% del presupuesto municipal).
La gestión del futuro del jardín urbano
Para tener un mantenimiento sostenible, hay que reexaminar las bases actuales del diseño urbano. Habrá que analizar e implantar otros modelos de gestión que en un futuro cercano nos ayuden a conservar las zonas verdes con una calidad aceptable para adaptarnos a situaciones de recortes presupuestarios. La flexibilización del modelo de gestión actual debe realizarse de forma conjunta entre las empresas y los Ayuntamientos, ya que a ambos les interesa afrontar el problema para lograr el éxito en el ajuste.
Desde ASEJA e Iberflora, se defienden los siguientes puntos para que los jardines urbanos sean lo más sostenibles posibles:
- Tener en cuenta la importancia económica global de las zonas verdes.
- Hacer ver a los Ayuntamientos que la reducción del importe destinado a la conservación de las zonas verdes es un error ya que cuando se quiera regenerar y volver a mantener, puede tener un coste demasiado alto.
- En la normativa de contratación pública, se hay que establecer criterios más racionales de contratación.
- Realizar, en un entorno de colaboración público-privada, un estudio previo de clasificación de las zonas verdes, definiendo tipologías para cada ciudad y unos niveles de calidad para cada una de ellas. Ello permitirá definir adecuadamente el coste del servicio.
- Dimensionar y valorar el nuevo servicio para acotar el problema económico y cuantificar los ahorros con el fin de acreditar a los responsables de la gestión el alcance de dichos ahorros.
- Considerar alternativas de financiación complementarias que ayuden a garantizar la sostenibilidad económica del mantenimiento.
Como podemos ver, los espacios verdes y los jardines urbanos en las ciudades son muy importantes, y debemos realizar los estudios tanto de coste de realización como de mantenimiento, para que estos sean de calidad y sean lo más sostenibles posible.
*Fuente: Estudio ASEJA
*Imágenes: Pinterest.
